Sindicat de Treballadors de Seguretat de Catalunya

No hay discusión de bar que se valore entre vigilantes, sin que aparezca la típica frase, … esto nos pasa por que los sindicatos son unos vendidos…. son unos come gambas… sólo quieren liberarse… pero si un vigilante quisiera enriquecer el debate añadiendo un poco de autocrítica en el sentido de… Nosotros tenemos gran parte de culpa por que somos los que nos vendemos por un par de findes de semana libres o un servicio fijo. Seguramente le mirarían raro y se fijarían en lo que está bebiendo. Pero no hace falta estar borracho ni ser muy inteligente para darse cuenta de lo que es obvio, con un poquito de sentido común y menos hipocresía uno puede adivinar lo que se esconde tras los siguientes escenarios: El “jefe de equipo” de Paco, le llama y le dice, que tiene que votar a su sindicato ya que “fomenta un clima laboral positivo” (que suena muy bien, pero significa lo que significa). El inspector de empresa, número uno en la lista de su sindicato visita a Manolo y le ofrece un servicio fij

  Mafia: Organización estructural cuyo objetivo es sacar provecho, sin demasiados escrúpulos, de algún sector de negocio, haciéndose con el poder  económico, administrativo y operativo Para las empresas de seguridad, los servicios de transporte público son la joya de la corona. Decenas de millones en licitaciones, cientos de vigilantes subrogados, publicidad extra ... pero como veremos a continuación, no es oro todo lo que reluce, de hecho, rascando un poco aparece cobre e incluso mugre. Pongamos como ejemplo Renfe Cataluña, que cada dos o tres años lanza carnaza en forma de licitación, sabiendo con total seguridad, que en este sector tan poco profesionalizado, picar.... pican. Efectivamente, aparecen 3 o 4 empresas (cada vez menos), que sin hacer los deberes básicos (estudiar al cliente, visitar servicios, hablar con personal o con comités de empresa), empiezan a lanzar sus superofertas de verano para licitar, cálculos muy por debajo de lo rentable y entre esas ridículas ofertas, la m

  Hablando entre vigilantes, ¿Cuántas veces hemos oído, no somos más que números para la empresa?. Bien, si eso fuera así, desde aquí te preguntamos ¿y tú, qué número quieres ser? Pongámonos en situación con un ejemplo real: Tenemos a un vigilante trabajando en un servicio de ENERPRO que está a punto de subrogar a ILUNION , pero por casualidades de la vida, (por ser un trabajador que reclama sus derechos, estar afiliado a un sindicato activo, por caerle mal a un jefe de equipo , a un inspector de turno o cualquier circunstancia que suele y no debe pasar), resulta que justo antes de la subrogación le cambian de servicio. Por otra de las casualidades de la vida, a muy poco tiempo, este servicio se pierde, con la consecuencia que, nuestro compañero no es ni subrogado por ILUNION ni ENERPRO lo quiere, ya que según ellos, debería pertenecer a ILUNION.  De este modo, el compañero se suma al limbo de los vigilantes desamparados, tratado como un número más .   Llegados a este punto, para